Delicias Dulces de Marruecos: Un Viaje por los Postres y Pasteles Tradicionales

Pau
26 nov
3 Min. de lectura

Marruecos es un festín para los sentidos, y aunque su gastronomía es famosa por los sabrosos tajines y el aromático cuscús, el verdadero colofón a cualquier comida o la compañía ideal para el té de menta es su exquisita repostería.

La dulcería marroquí no se anda con medias tintas: es rica, aromática y, a menudo, utiliza ingredientes tradicionales como la miel pura, las almendras, el agua de azahar y una variedad de especias cálidas.

¡Prepara tu paladar para un paseo por las delicias dulces más tradicionales de Marruecos!

1. El Clásico Inconfundible: Los Cuernos de Gacela (Kaab el Ghzal)

Si solo pudieras probar un dulce marroquí, este debería ser el elegido.

¿Qué es? Literalmente traducido como "cuernos de gacela", son pasteles delicados en forma de media luna.
Sabor y Textura: Tienen un exterior de masa fina, casi deshojada, que esconde un delicioso relleno de pasta de almendras perfumado con agua de azahar o canela. Son sutiles, elegantes y no excesivamente empalagosos.
¿Cuándo comerlos? Son la estrella de cualquier celebración y el acompañamiento perfecto para un auténtico té de menta.

2. La Joya Crujiente: Chebakia (o Mkharka)

Este es el dulce más asociado al Ramadán, pero su popularidad hace que se encuentre durante todo el año en muchas panaderías.

¿Qué es? Una masa de sésamo y anís que se trenza en una forma floral característica, se fríe y luego se sumerge en un almíbar espeso con miel, a menudo perfumado con agua de azahar.
Sabor y Textura: Extremadamente dulce, meloso y pegajoso, con un fuerte sabor a sésamo y especias. Su textura es crujiente por fuera y jugosa por dentro gracias al baño de miel.
Dato Curioso: Requiere mucha paciencia y habilidad trenzar cada pieza a mano.

3. El Postre de Lujo: Fekkas

Piensa en ellos como la versión marroquí de la galleta biscotti italiana, aunque con un toque único de frutos secos.

¿Qué es? Son galletas secas y crujientes, de doble cocción, rellenas de almendras y anís (o, a veces, pasas y nueces).
Sabor y Textura: Tostados y con un ligero sabor a nuez, son perfectos para mojar.
¿Cuándo comerlos? Ideales para el desayuno o para sumergir en el té. Hay variedades saladas también, ¡pero la versión dulce es la tradicional!

4. Los Pequeños Bocados de Almendra: Ghriba

Estas galletas son un pilar de la repostería casera marroquí, con muchísimas variaciones regionales.

¿Qué es? Generalmente, son galletas redondas y blandas hechas a base de almendras, coco o sémola.
Sabor y Textura: La variedad más famosa es la Ghriba Bahla (la "loca"), que se caracteriza por una textura desmoronable y una superficie agrietada muy distintiva. Suelen tener un sabor intenso a nuez y son sorprendentemente suaves por dentro.
Perfectas para... Servir en bandejas de petit fours en celebraciones o simplemente como un dulce a media tarde.

5. La Tarta de Crepes: Msemen y Baghrir (Con Toques Dulces)

Aunque no son estrictamente "postres" en el sentido occidental, estas masas planas se sirven casi siempre con acompañamientos dulces que las convierten en un verdadero manjar.

Msemen: Se trata de una especie de crepes cuadrados y hojaldrados. Se comen a menudo untados con una mezcla de miel y mantequilla derretida o amlou (una crema de almendras, aceite de argán y miel).
Baghrir: Conocidos como los "crepes de mil agujeros". Se caracterizan por su textura esponjosa y porosa. Se sirven calientes y se rocían generosamente con mantequilla derretida y miel.

Consejos para el Viajero Dulcero

Dónde Probarlos: Aunque puedes encontrar estos dulces en los zocos, para la mejor calidad y frescura busca las pastelerías tradicionales o patisseries fuera de las zonas turísticas principales.
Acompañamiento: Siempre acompáñalos con una taza de té de menta (el whisky marroquí). El amargor del té y la menta fresca cortan la riqueza de los dulces a base de miel y almendra.
Regalos: La repostería es un regalo popular. Puedes comprar cajas mixtas bellamente presentadas para llevar a casa.